Como bien sabes, Súper Mamá, el padre es una figura importante en la vida de tus hijos. Ellos son parte de ese ser especial, quien todos los días te hace crecer, enseñándote a ser mejor persona.
Y aunque como mamá hagas muchas cosas, existen otras particulares que los padres hacen bastante bien. Aquí te comentamos ocho cosas clásicas que hace un padre.
1. Enseñar a montar bicicleta
Generalmente, son los padres quienes se dedican más a todas esas actividades que demandan rodar en bicicleta, patineta o monopatín, e incluso cuando tu hijo va a tomar el auto.
Los padres tienen esa paciencia particular, aún cuando el niño se caiga o raspe en el intento. Les ayudan en ese proceso de independencia, enseñándoles que si en la vida te caes, te levantas de nuevo y sigues adelante. ¡Una verdadera enseñanza de vida!
2. Inculcar amor por un deporte
Si eres panameña/o, de seguro fue tu papá (o tu figura paterna) quién te inculcó el amor a “La Sele”, ir al hipódromo, o amar a tu equipo favorito de béisbol panameño.
Si la afición es por fútbol, entonces será sin duda de la liga europea. Y tendrás tendencia por el “Real Madrid” o el “Barca”, que son los equipos más emblemáticos. Lo cierto es que no hay como papá para inculcar este amor al deporte.
3. Crear amor por las actividades extremas
Es raro, Súper Mamá, que dejes a tu hijo practicar un deporte o actividad extrema, ¿cierto? Quizás porque como madre te da terror, que algo malo pueda pasarle, siempre pensando en su seguridad e integridad física.
Y es por eso que están los padres, ellos impulsan en sus hijos esta capacidad para aventurarse por hacer actividades extremas. Quizás no todos son así, pero a veces hasta una vuelta en una montaña rusa cuenta como algo extremo, Súper Mamá.
4. Emocionarse con la naturaleza
Para los padres, especialmente, resulta algo muy emocionante reconectarse con la naturaleza. Ya sea a través de actividades en el mar, acampar, o sencillamente armar un picnic en el parque.
Estos espacios ofrecen una oportunidad única para conectarnos con algo mucho más grande que nosotros/as. Les enseña cómo cuidar del medio ambiente y apreciar las cosas sencillas que nos rodean. Y, por ejemplo, reforzar nuestra relación con nuestros hijos/as – que al final es lo más importante.
5. Dejar comer a sus hijos sus comidas preferidas
¡Esto es un clásico de los papás que aman comer! Se convierten en cómplices de sus hijos y, cuando están a solas con ellos, eso muchas veces significa: pizza, papitas, helado, ¡y muchas cosas ricas!
A veces se las ingenian para mantener un estilo de vida saludable en sus peques, pero de vez en cuando, esos gustitos suelen ser las aventuras más divertidas con papá.
6. Enseñarle a sus hijos a defenderse
A toda madre le cuesta ver a su hija/o sufrir. Y, muchas veces, nos apoyamos en papá para que sea quienes le inyectan esa determinación y firmeza que toda persona necesita para alcanzar sus sueños. Es lo mejor de dos mundos porque ofrecen un abrazo cálido y las palabras de aliento para atravesar cualquier momento difícil.
7. Explicar lo importante que es saber ganar y saber perder
No hay como papá para educar con paciencia, explicarle a su hija/o la aceptación cuando se gana y donde se pierde. Saber reconocer esa delgada línea entre la humildad y el reconocimiento. Y es esa lección la que da pie a que el futuro hombre o mujer, sepa levantarse y seguir adelante ante cada caída de la vida.
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