Súper Mamá, ¡Un cutis sano se nota a simple vista! pero, ante las exigencias diarias del trabajo y la casa, olvidamos prestarle la atención merecida, haciendo que aparezcan impurezas e imperfecciones que terminan dañando nuestra autoestima. Hoy Súper Mamá, te diremos los puntos claves que debes tener en cuenta para mantener el cuidado de tu rostro, de una forma fácil y rápida ¡porque somos mujeres ocupadas, pero siempre hermosas!
Son tantas las actividades realizadas por día que al finalizar la jornada solo queremos quitarnos la ropa, ducharnos e irnos a dormir, pero Súper Mamá, cuidar de ti es importante, recuerda lo que siempre te hemos dicho ¡si mamá está bien todos a su alrededor estarán bien. Esta rutina de belleza que te traemos ¡te va a encantar! no te quitará mucho tiempo y los resultados serán espectaculares.
Paso 1. Limpia:
Super Mamá, te quedarías asombrada con la cantidad de impurezas que es capaz de acceder la piel de nuestro rostro (incluso si no sales tanto de casa), sin contar con la grasa que producimos a diario y que si no es removida puede ocasionar comedones o el tan temido acné.
Los expertos recomiendan limpiar el rostro por lo menos dos veces al día, en la mañana (para quitar ese exceso de grasa producida mientras dormimos) y en la noche (para eliminar las impurezas adquiridas o el maquillaje). Te recomendamos utilizar ingredientes que cuenten con aloe vera, té verde o té negro.
Paso 2. Tonifica:
Aplicar un tónico permite limpiar y preparar los poros de tu piel para recibir de manera eficaz los productos de hidratación y humectación posteriores. Otro de los beneficios de usar un tónico es para equilibrar el PH de la piel. Elige la opción que se adapte a tu cutis y que no contengan alcohol o químicos que terminen irritándolo o resecándolo. El agua de rosas es un excelente tónico, que además de ser suave con tu rostro le aporta frescura y luminosidad.
Paso 3. Exfolia:
Súper Mamá, debes exfoliar tu rostro entre 2 0 3 veces por semana (esto dependerá del tipo de piel que tengas) si tu rostro es muy seco te recomendamos hacerla 1 0 2 veces, si por el contrario presentas una piel mixta o grasa puedes realizarla hasta 3 veces. Utiliza productos que estén elaborados con granulados suaves y aplica masajes circulares para remover las impurezas. Entre las opciones caseras puedes encontrar el bicarbonato, café o avena para tener una piel limpia y suave.
Paso 4. Hidrata o Humecta:
Este paso es fundamental que lo realices una vez hagas la exfoliación, así tu piel puede regenerarse y recuperar las propiedades que necesita. Súper Mamá, si bien este paso se le llama tradicionalmente “hidratación” dependerá de tu tipo de cutis utilizar productos que humecten o hidraten.
Para una piel seca es recomendable hidratar con opciones que aporten lípidos al rostro, si tienes una piel grasa lo mejor es usar un humectante que aporte agua, pero si, por el contrario, cuentas con un cutis mixto debes usar la combinación de ambos. La miel, el aceite de coco, el pepino y el aloe vera son ideales dependiendo de las necesidades.
Paso 5. Protector solar:
Súper Mamá, te venimos diciendo que cada paso es importante, pero usar un protector solar debe ser una prioridad, un paso más en tu rutina de limpieza y de maquillaje. Elige una opción que vaya con tu tipo de cutis, en crema / leche si tienes un rostro seco, de gel si lo tienes graso o estilo mousse si cuentas con uno mixto ¡Hay para todas!
Otros de los factores que debes tener en cuenta es la protección FPS (UVA/UVB). Los expertos recomiendan utilizar FPS 25 – 30 para una exposición corta y más de 50+ en una exposición larga, así podrás evitar el cáncer cutáneo, las quemaduras solares y el fotoenvejecimiento.
¿Una rutina fácil de mantener verdad Super Mamá? ¡además que te la mereces! Mira estas tres mascarillas que te dejamos para que tengas opciones divertidas en casa.
- Miel y limón: limpia, hidrata y exfolia la piel.
Agrega en una taza pequeña dos cucharaditas de miel y unas gotas de limón, mezcla bien y aplícala en todo el rostro (cuidando el contorno de los ojos), déjala actuar por unos 20 minutos y retira con abundante agua fría. Aplica esta mascarilla de noche o esos días que no saldrás de casa, ya que el limón y la exposición del sol puede crear manchas en el rostro.
- Yogur, avena y naranja: elimina la grasa, suaviza e hidrata.
En una taza agrega 3 cucharadas de yogur natural, 1 cucharada de avena gruesa y una cucharada de jugo de naranja. Mezcla bien y coloca en el rostro, déjala actuar por unos 20 minutos y retira con abundante agua fría.
- Azúcar, aceite de almendra y papaya: exfolia, hidrata y aclara.
Coloca en una taza pulpa de papaya y tres cucharadas de azúcar tritura bien hasta mezclarlos y luego agrega una cucharadita de aceite de almendra, remueve bien y aplica en tu rostro dejándolo actuar por unos 15 minutos retira con abundante agua fría.
Súper Mamá, consiéntete con estos pasos y tu rostro te lo agradecerá. Utiliza las recetas que te recomendamos según tu tipo de rostro y ¿cuéntanos qué te pareció? ¡te leemos!
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