El embarazo es la etapa más maravillosa y el primer encuentro entre padres e hijos trae innumerables beneficios. Preguntémosle de todo al ginecólogo y olvida los famosos mitos. Te damos las razones a continuación
Texto: Iranela Sánchez
Ese primer contacto entre madre e hijo es crucial. Se crean vínculos que serán beneficiosos a corto y largo plazo para ambos. Sin embargo, el papá también tiene su importancia y ya no se queda afuera de la sala de parto -dando vueltas como un león enjaulado- esperando a que el doctor salga para decirle: “ya nació”. Ahora puede entrar al quirófano e involucrarse en el nacimiento de su hijo, hasta puede cortar el cordón umbilical y servir de papá canguro.
¿Cómo que papá canguro? La práctica fue implementada en Inglaterra y Estados Unidos. Consiste en que el progenitor sirve de incubadora humana. Del salón de operaciones sale en sillas de ruedas, con su hijo en brazos hasta llegar a la sala de Neonatología. Y este servicio lo brinda también Hospital Nacional, uno de los pioneros en esta práctica.
Esta es una de las bondades que brinda el Nacimiento piel a piel. “Para nosotros es importante que papá y mamá disfruten el embarazo en todas sus etapas y aún más el momento de parto”, destacó el Dr. Adolfo Tinker, director del departamento de Ginecología y Obstetricia del Hospital Nacional.
Se ha comprobado que, con esta práctica, cuando el bebé siente los latidos de la madre, específicamente los del cuello, se tranquiliza de inmediato. Además, al colocarlo por primera vez en el pecho, empieza a succionar y en 24 horas la madre está produciendo leche. También se regulan la temperatura y el azúcar en la sangre del bebé. ¡Increíble, divina naturaleza!
Pero no todo es tan fácil. El Nacimiento piel a piel no está indicado para todas las futuras madres por diversos motivos, entre los cuales podemos mencionar: si el bebé nace antes de las 39 semanas; si el médico tiene preocupaciones acerca de la salud del bebé y de la mamá y; si deben someter a la madre a anestesia general. El mismo causa un sueño profundo durante la cesárea así que no puede disfrutar del alumbramiento.
Mitos que no debemos considerar
Durante el embarazo, abuelas, amigos y demás conocidos tienen una serie de mitos que son falsos. Desde chicos nos dicen que una mujer en estado: “no debe cruzar las piernas, porque el niño nacerá con el cordón en el cuello”, “no comas piña”, “no te agaches”. Uf, no nos alcanzarían los dedos de las manos para enumerarlos. Algunos son:
¿Por qué se enreda el cordón?
Fácil, por lo largo que es. “He visto bebés con cinco vueltas en el cuello y no ha pasado nada, debemos preocuparnos cuando disminuyen sus movimientos. El bebé siempre tiene que moverse.”, enfatiza el Dr. Adolfo Tinker. ¡Así que cruce las piernas las veces que quiera, no pasa nada!
No hagas ejercicio
Muchas veces los ejercicios sirven para evitar y aliviar los dolores musculares provocados por el embarazo. No todos están asociados con amenazas de aborto.
No comparar un embarazo con otro. Todos no son iguales.
Intimidad
Mantener relaciones durante el embarazo puede dañar al bebé. Falso. En ningún caso se puede hacer daño al bebé ni por la penetración ni por soportar peso sobre la panza porque está bien protegido dentro del útero, que está sellado por el tapón mucoso y rodeado de una bolsa de líquido amniótico que amortigua la presión.
Que un niño de siete meses pega más que uno de ocho
Cierto, pero saben por qué. Porque a ese niño de siete meses ya se le han preparado los pulmones con corticoides, así que logran la madurez pulmonar.
Además, saben ¿por qué no puede haber niños de diez u once meses?
Porque la placenta deja de funcionar al noveno mes. Por eso que los doctores se preocupan cuando los bebés se pasan de la semana 41 o 42, porque de un momento a otro la placenta se para.
Para finalizar, el galeno recomienda que debe existir una maravillosa confianza entre médico y paciente. Durante el embarazo hagamos todas las preguntas que se nos ocurran, aunque a veces nos parezcan tontas. Confiesa que la Ginecología es una especialidad complicada porque se atienden a dos pacientes al mismo tiempo. “Si la mamá está bien, el bebé lo estará y viceversa. Así que disfruten su embarazo al máximo”.
Y para ti Súper Mamá, ¿cómo fue ese primer encuentro entre padres e hijo? ¿Qué tipo de parto fuiste? ¡Coméntanos!
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