in

AmorAmor IncreíbleIncreíble LindoLindo WTFWTF

Los Terribles Dos: ¿Cómo Manejarlos?

Porque todas hemos pasado por ahí, Super Mamá.

Aprender a sobrellevar los terribles dos de tu peque no es tarea fácil, Súper Mamá. Esta etapa supone un cambio drástico en su forma de ser, tanto así, que se le ha dado ese nombre. Es una fase donde tu hijo/a empieza a adquirir autonomía, tiende a querer imponer sus deseos, y en su vocabulario se instala el “no”.

En este artículo, te contaremos un poco más sobre lo que debes esperar, cómo manejarlo y tener (o por lo menos, intentar tener) #TodoBajoControl.

¿Qué pasa en esta etapa?

En esta etapa, Súper Mamá, tu peque recurre a todo tipo de estrategias desesperantes para llamar la atención de sus padres: lloriqueos, berrinches, pataletas, gritos, entre otros. En la mayoría de los casos, ni tu propio hijo/a sabe por qué tiene esa actitud, pero es importante ayudar a canalizar esta conducta, para que no tenga una acción devastadora en el niño(a), ni en ti. 

En la práctica, los terribles dos pueden iniciarse a partir de los 18 meses de edad. Se denotan los cambios cuando tu peque comienza a medir sus fuerzas y esa actitud de adquirir más autonomía rebelde puede ir creciendo hasta los 4 años. Por esta razón, es importante tomar cartas en el asunto para que tu tesoro no controle de manera equivocada su libertad de hacer, pensar y proceder. 

En general, verás a tu bebé mostrándose caprichoso y egocéntrico (“todo es mío”), tiene rabietas y se sentirá irritable con mucha facilidad. Incluso, llorará para poder conseguir sus objetivos.  Este tipo de actitudes resultan bastante desesperantes y agotadoras para los padres, especialmente cuando el niño(a) sale a la calle con sus familiares, haciendo todo un espectáculo de mal gusto. Pero no debes preocuparte Súper Mamá, porque solo es una fase de tu peque y puedes tener ciertas actitudes y comportamientos hacia el niño(a) que le ayuden a controlarse y superar con éxito esta etapa.

Veamos algunos consejos importantes que puedes aplicar en los terribles dos años de tu peque. 

Crea rutinas

Es importante crear una jornada diaria con actividades que él sepa debe realizar frecuentemente. Esto ayudará a que tu hijo/a tenga más confianza y seguridad en sí mismo, sin necesidad de hacer ningún tipo de rabietas. Este orden y planificación diaria, le hará saber que hay un tiempo y momento para todo: la hora de bañarse, de comer, hacer dibujos (garabatos), hora de juego, de descanso, entre otras actividades que puedes incluir de acuerdo a tu jornada. 

Anticípate a la reacción de tu peque.

Como madres, siempre conocemos a nuestros hijos muy bien. Si sabes que algo le molesta o enfada a tu pequeño y que eso puede desencadenar en una rabieta, busca la forma de evitarla. Esta acción dependerá de la personalidad de cada niño(a), pero en general puedes utilizar: música relajante, conversar con él a solas mirándole a los ojos en un tono de voz bajo, o proporcionándole un juguete didáctico favorito con el que se concentre. Esto ayudará a lograr bajar su nivel de irritabilidad.

Dedícale tiempo

Es importantísimo hacerle sentir al pequeño, que él te importa. Muchas veces por el trabajo, descuidamos a nuestros tesoros y es por eso que ellos buscan la forma de hacerse sentir, pero no lo saben expresar de la mejor manera, y la verdad es que no tienen que saberla, son solo niños. Por ello, es clave que le dediques tiempo de calidad creando un vínculo especial, una relación cercana de seguridad y confianza. Busca espacios diarios para jugar con él, hablar, cantarle, leerle un cuento u otras actividades a manera de compartir con él sanamente. En esos momentos de juegos y de interacción con tu pequeño, dale todo tu afecto. Acuérdate de consentirle con besos y abrazos. El contacto físico es vital para su sano desarrollo emocional. 

Crea normas de convivencia

Aunque tu niño sea pequeño, él entiende perfectamente lo que quieras expresarle. Debes conversar con él sobre las normas y límites que debe tener en la casa y en espacios externos donde suelan salir. Como por ejemplo: visita a casa ajena, en el parque, cine, restaurante, entre otros. De esta manera, tu peque sabrá cómo debe comportarse en cada momento social.  

La edad decisiva para que el niño comprenda estas pautas es esta, no la dejes pasar para que no sea un volcán en erupción, a medida que vaya creciendo.

Nunca reacciones con violencia

Si el niño tiene una rabieta, pataleta o empieza a hacer algún berrinche no lo calmarás con acciones violentas. La idea es que el niño deje esa conducta. Para ello háblale con voz baja, mirándolo directamente a los ojos, asegurándote que vea tus labios para que comprenda lo que quieres decirle. Dirígete con él a otro espacio de la casa, o lugar donde se encuentren para sacarlo de la escena del berrinche e invitarle a calmarse. 

Evita ofrecerle premios para calmar cualquier tipo de rabietas, ya que no conduce a nada buena, sino más bien, le estarás enseñando que a cada rabieta obtendrá algo que le gusta y te manipulará con ello. 

Siguiendo estos sencillos consejos Súper Mamá, lograrás pasar esta etapa de los terribles dos años de tu peque, con 20 puntos.

Coméntanos como te va con estos consejos. Tu opinión es valiosa para nosotros. Te leemos. 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Cargando…

0

3 Ideas de Batidos Para Tu Peque

¿Quieres Un Carro Nuevo? ¡Esta Promo Es Para Ti!