Súper Mamá, los primeros días de escuela son muy importantes para nuestros peques, estos entran en un estado de euforia por iniciar las actividades, estrenar sus útiles escolares y conocer nuevos amiguitos. ¡Nosotras también sentimos emoción y orgullo por ello!, pero hay algo que no debemos dejar pasar por alto, los nervios.
Es en estas etapas donde nuestros pequeñines empiezan a experimentar sentimientos de miedo, estrés y preocupación por tener que enfrentarse a lo desconocido, eso está bien Súper Mamá, es parte de la vida sentir esas emociones cuando algo nos importa, lo que no debemos permitir es que estas nos absorban e impidan cumplir el proceso, nosotras lo sabemos, ahora toca enseñarles a ellos cómo hacerlo.
Hoy Súper Mamá, queremos mostrarte algunos tips para que enseñes a tus peques a tener tranquilidad y confianza para que pueda disfrutar y sacar provecho de sus primeros días en clases.
Súper Mamá, ¿te pasa que algunos de tus pequeñines se vuelven un manojo de nervios cuando inician el nuevo año escolar? Es normal, forma parte del proceso y esto demuestra que están comprometidos con la actividad. Pon estos tips en práctica para ayudarles a superar el miedo al cambio:
¡Demuéstrale que estás orgullosa!
Súper Mamá, demostrarle a nuestros peques lo orgullosos que estamos de ellos, hará que se sientan mucho más seguros e inicien las clases con buen pie. Es un hecho, están creciendo y con ellos van aumentando las exigencias de la vida, ver cómo las asumen y se enfrentan a ellas, nos hace sentir que les hemos dado las herramientas adecuadas para salir adelante y que las decisiones tomadas han merecido la pena, así que este punto no lo tenemos que fingir, ¡estamos orgullosas!
Algunas frases con las que puedes elogiar adecuadamente a tus hijos son: estoy orgullosa de ti, tu proceso y todo lo que has logrado, me siento feliz de ser tu mamá, yo sé que tú puedes hacerlo, estaré aquí para ti siempre, mamá siempre te va a amar, eres lo más importante en mi vida.
Elogia sus esfuerzos, sin importar si ganan o pierden
Súper Mamá, siempre nos han enseñado a enfocarnos en la meta, conceptualizando que, si no ganamos, hemos fracasado y esto, es totalmente falso. Es importante lograr nuestros objetivos en la vida, pero aún más importante es saber valorar el esfuerzo que hacemos para llegar a ellos, como dice la frase “no es la meta, sino el camino”.
Súper Mamá, sabemos que la vida es así, intentar para algunas ganar y otras aprender, esto es clave inculcarlo en nuestros peques. Una persona que aprende a admirar los procesos de su vida, sabe que para alcanzar algo, primero debe intentarlo, posiblemente lo logre o quizás no se dé a la primera, de allí es donde nace la perseverancia.
Tu hijo o hija nunca debe sentirse avergonzado por intentar cumplir un sueño, ni ver los “errores” como fracasos, todo lo contrario, debe encontrar en ellos alguna oportunidad.
Anímalo para que regrese siendo el mejor
Aquí no nos estamos refiriendo a que tus hijos deban competir para ser el mejor de la clase o entre sus amiguitos, sino de ser el mejor para él o ella. Cada día está lleno de circunstancias que nos permiten aprender, ¡motiva a tus hijos para que las aprovechen y se conviertan en su mejor versión! Háblale de las cosas nuevas que podrá aprender en clases y luego cómo puede llegar a casa para transmitirte toda esa información, así tú puedas profundizar el tema con ellos.
Enséñale a hacer algunas cosas
Súper Mamá, en este punto es fundamental que tengas en cuenta la edad de tus hijos, así puedas ir delegando tareas para que aprendan a hacer algunas cosas por su cuenta. Esto creará independencia en tus hijos, los hará sentirse mucho más seguros y en confianza para ingresar al colegio. Permite que busquen su ropa, armen su bolso, se cepillen, se vistan y coman en la mesa, por ejemplo. En las primeras semanas puedes guiarlos y apoyarlos, pero sin excederte, hasta que lo hagan por sí solos.
Mamá, siempre va a estar
Súper Mamá, en el mundo ya hay mucho jueces, aprobando y desaprobando todo lo que hacemos, ¡no te conviertas en una más para tus hijos!, sé esa persona que va a estar siempre de forma incondicional, ¿fue un buen día en la escuela?, ¡festejemos!, ¿fue un mal día?, ¡vamos a escuchar y entender!
Nuestros hijos no necesitan a una mamá que les diga lo perfecto que tienen que hacer las cosas, ellos buscan aceptación y empatía con la persona que están aprendiendo a ser. Ese apoyo ilimitado ayuda a nuestros peques a construir la confianza que se requiere para sentirse útil y funcional.
Súper Mamá, nuestros peques son personas únicas y especiales que están en desarrollo, ellos cuentan con nosotras, no los decepcionaremos. Aplica estos tips para que vayan desarrollando su confianza y se conviertan en seres felices en el futuro. Cuéntanos Súper Mamá, ¿qué te pareció el artículo? ¿Te han servido estos consejos? Te leemos.