Como Super Mamás optemos por inculcarle hábitos alimenticios saludables a nuestros hijos, llevarlos regularmente al odontólogo y ayudarlos a tener buenos hábitos de higiene bucal.
Texto: Iranela Sánchez
¿Qué es la salud bucal y por qué es importante?
Hablar de salud bucal en nuestros días, es un tema que a muchas personas les causa mucho “respeto”, pues la educación y los avances en esta rama de la salud, han permitido que el tema sea más aceptado y las visitas al odontólogo formen parte de la salud integral de las personas desde temprana edad.
Cuando se hable de salud bucal, se incluyen todos los tejidos que se encuentran en la boca: dientes, tejidos de soporte de los dientes, como encía, hueso y demás estructuras anatómicas presentes en boca como lengua, paladar, labios, mejillas, piso de boca y otras.
Al realizar una evaluación deben incluirse todas las estructuras y no sólo ver los dientes. La razón de esto es que en la boca pueden estar presentes en muchas ocasiones los primeros síntomas y signos de algunas enfermedades sistémicas. La saliva puede ser una herramienta de diagnóstico para niveles de drogas, toxinas, hormonas, anticuerpos para detección de enfermedades o para pruebas de laboratorios.
Pero ¿cuándo debo llevar a mi hijo a su primera cita con el Odontólogo?
La primera visita muchas veces no es muy grata para los niños, ya que acude esa primera vez a extraerse su primer “diente de leche” o para realizar su primera restauración o “calza”. “Los mismos son procedimientos que la mayoría de las veces son dolorosos y allí vienen los primeros traumas al odontólogo; por esta razón nuestra recomendación básica y muy personal después de algunos años de experiencia es llevar al niño o niña esa primera vez cuando consideremos que su comportamiento sea el mejor o no le genere miedos, o sea que exista en esa primera visita una comunicación paciente-odontólogo”, sugiera la dra. Diana Jiménez.
Confiesa además que, la primera dentición o los llamados “dientes de leche” puede salir desde que nace un bebé, aunque bastante raro, pero no podemos dejar de decirlo y de allí puede ser diferente para cada uno. Lo más común es desde los 6 meses en adelante y puede completarse en forma diferente; pero lo común es al año y medio o dos. La dentición primera es de un total de 20 dientes; y casi siempre son pequeños, blancos y con algunos espacios.
La importancia de la alimentación en la salud bucal de los niños
En los primeros años es importante el tipo de dieta que tenga el niño. Si el consumo de alimentos con azúcares o dulces pastillas u otros es alto las probabilidades de caries son mayores, igualmente si el bebé toma biberón con azúcar y se duerme con él también puede tener caries de biberón; así pues, se recomienda que no se azucare la leche desde bebé si es posible, y que el consumo de pastillas y dulces sea poco.
Cuidados esenciales durante la primera dentición
Las recomendaciones básicas en los hábitos de higiene bucal en bebés son que las madres les eliminen la placa dental con cepillos especiales de bebé, y también se pueden ayudar con una gasa, realizar esto por lo menos 3 veces al día principalmente en las noches.
Cuando llegan a los 6 años la mayoría de las veces empiezan a perderse los dientes primarios o empiezan a “mudarse”. Casi siempre los primeros son los dientes inferiores anteriores, se les aflojan suficiente y pueden ser extraídos en casa.
Cómo manejar la etapa de los dientes permanentes
Es importante que en este momento los padres sepan que a esta edad sus hijos ya presentan dientes permanentes o de adultos, que no son reemplazados, y por ende deben cuidarlos. La edad puede variar desde 6 años tanto para niños y niñas y a partir de ese momento van a ir perdiendo sus dientes en diferentes edades en un promedio hasta los 12-13 años hasta completar la dentición permanente que, en ese momento deben ser 28 dientes, ya que las terceras molares o “muelas del juicio” comúnmente conocidas erupcionan en edad más adulta, completándose un total de 32 dientes permanentes.
Las visitas al odontólogo deben incluir una revisión para descartar caries dental o enfermedades en las encías que también pueden tener los niños, profilaxis dental o limpieza y aplicaciones de flúor por lo menos cada 6 meses, evaluación en la posición de los dientes para diagnosticar si debe acudir a otro especialista por malposiciones dentales o falta de espacio para los dientes permanentes y también descartar problemas respiratorios o alérgicos y que muchas veces se cree que son problemas de origen dental.
Para finalizar, a todas esas Super Mamás se le recomienda que inculquen a sus niños lo siguiente:
- Hábitos alimenticios adecuados desde los primeros años de vida.
- Visita periódica al odontólogo desde temprana edad.
- Ayudarlo a tener buenos hábitos de higiene bucal.
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