Todos las mamás y los papás queremos que nuestros hijos/as tengan la mejor educación. Escoger un colegio reúne ciertos factores, pero uno de los más importante es la comodidad de nuestros hijos e hijas. Por eso, en este artículo nuestra Súper Mamá, Yescenia Navarro nos comparte su experiencia en la búsqueda del mejor colegio.
Todos las mamás y los papás queremos que nuestros hijos/as tengan la mejor educación. Escoger un colegio reúne ciertos factores, pero uno de los factores más importante es la comodidad de nuestros hijos e hijas. Por eso, en este artículo nuestra Súper Mamá, Yescenia Navarro nos comparte su experiencia en la búsqueda de la mejor escuela.
Texto por: Yescenia Navarro
Vida estudiantil
La vida estudiantil muchas veces está llena de los mejores recuerdos de nuestra juventud. Allí nos llenamos de conocimiento, aprendemos a trabajar en equipo, tenemos nuestros primeros logros, nos rompen el corazón por primera vez, y aprendemos sobre nosotras/os mismas/os. En fin, es una etapa inolvidable en nuestra vida. Por eso, al momento de tomar la decisión de qué colegio escoger para nuestros hijos, nos llenamos de muchas dudas y tratamos de informarnos lo más posible con la finalidad de tomar la mejor decisión.
Hoy en día, la educación ha evolucionado un montón en comparación a cuando yo estaba en la escuela (hace un poco más de 20 años). Y ni hablemos de los costos, antes con mucho menos de 100 balboas, podías pagar una mensualidad de una super escuela. Ahora hay mensualidades más caras que una hipoteca.
La educación está cambiando
Esta es una de las primeras consideraciones que deben hacer los padres y las madres : entender que la educación está cambiando. Esta nueva generación Alfa (nacidos del 2010 en adelante), se van a enfrentar a retos totalmente distintos a los que nos enfrentamos nosotras y nosotros, y conocemos hoy en día. Y, serán una generación con necesidades muy distintas a las nuestras. Quién sabe qué profesión nueva existirá cuando mis hijas vayan a la universidad (si es que aún existen las universidades tradicionales). Porque, así como han nacido los community managers o los digital strategist, quién sabe qué nuevas profesiones existirán en 15 años.
Desde que mi hija mayor Ana Gaby nació, la preocupación sobre cuál colegio elegir para ella siempre estuvo rondando en mi mente. Con mucha ilusión, su papá y yo nos hicimos la tarea y escogimos un preescolar conveniente. A solo 5 minutos de mi casa. Tenía buenas instalaciones, buena metodología, y un personal amable. Sin embargo, todos los días que Ana Gaby llegaba a la escuelita lloraba porque no quería entrar allí. Su maestra muy cariñosa la recibía todos los días y le pedía un abrazo, pero Ana Gaby nunca se lo daba.
Yo pensaba que era un proceso de adaptación y que pronto los llantos iban a cesar, pero pasaron los meses y nada. Un día, la maestra me preguntó si ella hablaba porque no lo hacía en clase. Y me sorprendí ante esta pregunta, porque era una lorita en casa. Me preocupé y le pregunté a una psicóloga qué pensaba sobre esto, a lo que ella respondió: “lo más importante es que tu hija esté feliz en la escuela”. Y esa frase fue más que suficiente, porque definitivamente Ana Gaby no era feliz en la escuela.
Una nuevo colegio
Al finalizar el año escolar, una amiga me invita a probar durante el verano un nuevo colegio que ella estaba abriendo. Accedí y metí a Ana Gaby con la intención de que fuera esa temporada a la escuela. Pero, para mi sorpresa, ¡mi hija se enamoró del lugar desde el día uno! Se quedaba sin problemas en la escuela, jugaba todo el día y estaba feliz. Lo que me terminó de convencer fue cuando un día llegamos y la vi correr a abrazar a su teacher que tenía 5 días de haberla conocido. Allí, me di cuenta de que mi hija era feliz en su escuela.
Cuando pienso en esta experiencia, se confirma mi idea que no existen colegios buenos o malos. Existe el mejor colegio para tu hija. Y este, era el mejor colegio para Ana Gaby en este momento.
Al momento de tomar una decisión tan trascendental, como lo es elegir la escuela de tu hija/o, es importante pensar en cómo esta se va a adaptar a nuestra hija/o y a nuestras necesidades como familia. Debemos buscar una escuela en donde ellos y ellas puedan crecer felices.
Recomendaciones para la búsqueda de un colegio
Yo estoy casi decidida por la escuela a la que irán mis hijas. Y, si ustedes están en este proceso, les dejo aquí algunas recomendaciones que pueden aplicar en esta búsqueda:
- Busquen un colegio que quede
cerca de su casa, así evitaremos que recorran largas distancias. Ya que el
tranque diario les roba tiempo de descanso o de otras actividades.
- Cuando estén seguros
del tipo de educación que quieren para sus hijos, busquen una escuela que les
ofrezca ese programa.
- Escojan una escuela que no solo se preocupe por lo académico,
sino que también preste atención a otras áreas. Hoy en día, las actividades
extracurriculares son tan importantes como las matemáticas, el arte, y las
ciencias.
- Es importante que las instalaciones sean
seguras. No teman preguntar sobre sus políticas de seguridad y que éstas estén
alineadas con lo que Uds. quieren para sus hijas/os.
- Siempre pregunten por los planes de
capacitación de los profesores. Es importante saber cómo el colegio invierte en
el entrenamiento de los docentes que estarán encargados/as en la vida de sus
hijas/os.
Estos puntos fueron de gran ayuda para mí, ojalá que a ustedes también les pueda servir.
Sabemos que escoger una escuela para nuestros hijos/as no es nada fácil. Por eso, te ayudamos mantener #TodoBajoControl aquí en Súper Mamás te brindamos algunos consejos para guiarte en esta importante elección.
¿Tuviste una experiencia similar a la de Yescenia? ¿Cómo te fue? Cuéntanos en los comentarios.
Ufff, este artículo es muy interesante, válido y muy certero en cuanto a las recomendaciones. Me pasó con mi hijo, Diego, que tiene una condición de DDA complicada con una patología neurológica que afecta su audición, sin embargo es un niño perfectamente normal, solo que hay que hacer ciertas adecuaciones curriculares y estar muy atentos con su desenvolvimiento. Cuando Diego pasó de Kinder a 1er. Grado, lo inscribí en un colegio que reunía las características necesarias para el desarrollo y la educación, fue de hecho una recomendación de su terapeuta quien incluso, visitó el lugar para cerciorarse que fuese el correcto, allí estuvo por 2 años, y todo perfecto hasta que en 3er grado vendieron el colegio, cambiaron la maestra, la directiva y la metodología, sin aviso y sin protesto, en medio del año escolar, vale decir. La conducta de Diego cambió totalmente, ahora se despertaba con dolor de estómago, o cabeza, sin ánimos, lloraba en el carro y me decía que no quería ir a clases, para mi fue un verdadero tormento. Al llegar el segundo boletín, sus notas estaban casi todas por debajo de 3, casi me muero!!!! Hable con la directora, con la maestra y no pudieron darme una solución que me convencerá, así que emprendí una nueva búsqueda de emergencia y di con un colegio espectacular, donde lo recibieron con los brazos abiertos, lo ayudaron a ponerse al día y donde además, se especializan en niños con condiciones similares a la suya, así que fue una verdadera bendición pasar por ese calvario. Hoy en día ya pasó a 1ero.de bachillerato con 4.6 de promedio, es una niño feliz y eso es lo que realmente me importa!!! Ver las señales, como dice Yescenia, es lo mejor que podemos hacer.
Gracias por dejarme compartir esto.
Saludos.
Buen día Laura!!
Definitivamente tiene mucho que ver el colegio. Es muy importante que nuestros pequeños se sientan felices y motivados. Saludos.