La empatía es la capacidad que nos permite desarrollar el “don” de entender y ser comprensivos con las emociones y pensamientos de las personas que nos rodean. Aunque en un principio se pensaba que esta era innata, con el tiempo se demostró que debe estimularse para potenciarla.
Esta cualidad ayudará a tus peques a tener relaciones saludables en el colegio, trabajo y con el resto de la sociedad. Lo recomendable es alentarla desde los primeros años de vida con pequeñas acciones. Hoy Súper Mamá, te daremos algunos consejitos para implementarla con tus peques en casa.
Sé su ejemplo
A los peques les encanta imitar el comportamiento de los adultos, esto lo convierte en una oportunidad perfecta para inculcar la empatía. Cada vez que veas a tus hijos transitar por una emoción (molestia, tristeza, ansiedad, felicidad), acércate a ellos para preguntarles cómo se sienten, escúchalos con atención y respeta el momento.
Deja que tus hijos observen cómo papá y mamá muestran empatía hacia otras personas: familiares, compañeros de trabajo, amigos, vecinos o alguien que tenga una dificultad en la calle.
Enséñale cómo debe actuar
La empatía puede ser una capacidad algo difícil de manejar, ya que muchas veces hay que dejar de lado el “yo” para entender el mundo del otro, así poder conocer sus emociones y pensamientos sin juzgarlos. Enseña a tus hijos a escuchar, mostrar un interés genuino por el problema y realizar preguntas u opiniones desde el respeto.
Practiquemos la empatía
Súper Mamá, nada mejor que la práctica para enseñar. Cuando estén en casa y suceda algún evento, deja que tus hijos participen comunicando lo que sienten, papá y mamá deberán hacer lo mismo. La idea es que ellos aprendan a entender sus emociones, sepan gestionarlas y exteriorizarlas sin dañar a otros.
Si sabes de algún amiguito o compañero del cole que esté pasando por alguna situación difícil, realiza preguntas al respecto y anímalos a armar un plan para que puedan apoyarlo durante la eventualidad.
La empatía va para todos
Mostremos a nuestros peques que la empatía no es solo para nuestros seres queridos, también es para todo aquel que nos rodea. En familia desarrollen proyectos donde puedan ir a ayudar a otros, por ejemplo, visitar un comedor comunitario, un hospital o refugio de mascotas, motívalos a que interactúen con ellos para entender sus historias y por lo que han pasado.
Autocontrol y marcar límites
La empatía ante situaciones que nos involucran tienen dos extremos: saber manejar nuestras emociones para comprender al otro y marcar límites para evitar que abusen de nosotros. Es fundamental que los peques aprendan a encontrar un equilibrio entre ambos. La primera para que sean tolerantes y respetuosos con las diferencias, la segunda para no aceptar acciones de terceros que les hagan daño.
Actividades y juegos en familia
Súper Mamá, el juego siempre será una buena opción para educar a nuestros hijos. Realicen tardes especiales de juegos e incluye algunos que les permita interactuar con esta capacidad. Te dejamos unas ideas divertidas:
- Adivinar la emoción del otro: cada integrante de la familia toda turno para hacer gestos de alguna emoción y el resto deberá adivinar de cuál se trata.
- ¿Cómo me siento? Elijan una emoción, por ejemplo, “me siento triste” o “me siento alegre cuando” y hagan una ronda donde cada quien diga algo que realmente los haga sentir dicha emoción.
- Teatro de las emociones: hagan una pequeña obra de teatro donde cada integrante tiene un personaje que refleje una emoción y cómo interactúan entre ellas para ayudarse.
- Juego de roles: intercambien roles por un día y actúen como lo haría la persona designada. Esto les permitirá saber lo que siente y piensa cada integrante de la familia en las diferentes situaciones.
Súper Mamá, enseñar a nuestros peques sobre temas como la tolerancia, respeto, empatía, comunicación asertiva, les permitirá ser adultos conscientes con su entorno, así poder establecer relaciones sanas y duraderas en el futuro. Cuéntanos Súper Mamá, ¿qué te pareció el artículo?, ¿qué otros consejos te gustaría agregar? Siempre te leemos.
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