¿Tu hijo sólo se comunica con gestos, Súper Mamá? De ser así, este artículo escrito por nuestra especialista, la fonoaudióloga Juanita García R., te puede ayudar.
¿Qué es la tentación comunicativa?
Una “tentación comunicativa” es una oportunidad para aprender el lenguaje. Crear una “tentación comunicativa” es una estrategia en la que puedes manipular un poco el ambiente para promover la comunicación verbal. Debes hacerlo de manera frecuente durante el día y de manera divertida. Aquí te dejo algunas ideas para ponerte en acción:
Estrategias para “pedir”
- Pon sus juguetes preferidos a la vista, pero fuera de su alcance. Los estantes altos son perfectos para que el niño señale y te diga “dame” o nombre ese juguete que tanto quiere.
- Reten un objeto necesario para alguna actividad: por ejemplo, sírvele su sopa sin la cuchara.
Estrategias para pedir “más”
- En la hora de su merienda, escoge un alimento favorito, como una galleta. Ofrécele sólo una porción de la galleta de manera que, como le encantan quiera pedir “más”.
- Inicia una actividad divertida; por ejemplo hacerle cosquillas, bailar. Interrumpe abruptamente la actividad y espera. Con seguridad, querrá pedir “más”
Estrategias para enseñar verbos:
- Guarda un juguete favorito en un recipiente transparente que el o ella no pueda abrir. Enséñale a decir “abre” para obtener su juguete.
- Cuando te hale de la mano para llevarte a algún lugar. Agáchate de manera que sus miradas queden al mismo nivel, y modela la palabra “ven”.
Estrategias para enseñarle a “repetir”
- Utiliza juegos de causa-efecto (aquellos en los que tocas el botón y sale un animal, o rompecabezas en los que pones la figura y suena el tren), cuentos sencillos de pocas imágenes en los que en cada página aparece el mismo animal, o quizás también quieras usar títeres, animales y transportes de juguete, para enseñarle las onomatopeyas es decir, los sonidos que producen éstos ( chu-chu, Miau ). Decir estos sonidos es más fácil y divertido que nombrarlos, así que con seguridad tendrás éxito.
Completar rutinas de lenguaje:
- Cuenta hasta tres antes de iniciar una actividad favorita: Cuenta uno, dos, haz una pausa, para que tu hijo diga “tres” y lanzarle la pelota. Algo que me funciona es contar hasta 3 antes de zurrarse o de lanzar carritos por una rampa.
- Cantar canciones cortas o rimas infantiles para que el o ella te ayude a “cantar”. ¿Cómo lo haces? Cuando tu hijo esté familiarizado con la canción y muestre agrado cada vez que se la cantas.. empieza a cantar y haz una pausa para que tu hijo la complete. Por ejemplo, Old McDonald para completar ee-i- ee-i-O)
Estrategias para “protestar”:
- Enseñarle a decir “no” evitará muchas “pataletas”, así que ofrécele un alimento que no le guste para que diga “no”.
Llamar a personas:
- Ve al otro lado de la puerta, tócala y háblale.. otra persona puede ayudarte y estar al lado del niño modelandole es “mamá”. Si apareces y le haces cosquillas y te vuelves a ir.. querrá llamarte de nuevo.
- ¿Y si Jugamos a las escondidas? Con solo cubrirte con una manta como jugando al peek-a-boo, tendrás una oportunidad para practicar que te diga “mamá”
Por último, no olvides:
- Cambiar tecnología por juegos y experiencias.
- Tener en cuenta el tiempo en el que de acuerdo a su edad, tu hijo se mantendrá “atento”. Si tiene entre 1 -2 años, podrá disfrutar la actividad por 7-8 minutos. Por esto es importante brindarle oportunidades cortas, pero varias veces al día, y controlar la cantidad de juguetes que se le presentan a la vez.
- Reforzar cada intento de comunicarse verbalmente.
¿Te sirvieron estas “tentaciones”? ¡Déjanos saber!