El dolor abdominal en los niños es uno de los trastornos que más afectan a los pequeños. Te explicamos cuáles son los síntomas, las causas y los remedios para tratar esta dolencia.
Texto: Iranela Sánchez
Cuando un niño tiene dolor de barriga genérico, el estómago y el abdomen son los focos que solemos considerar origen del dolor. Por tanto, a la hora de dirigirse al pediatra, hay que señalar si el dolor abdominal está acompañado de otros trastornos.
Síntomas del dolor de barriga:
- Si el niño también tiene fiebre, significa que el dolor de barriga puede haber sido causado por una infección viral.
- Si la orina es de color oscuro y la piel del niño está pálida y amarillenta, el hígado puede estar afectado.
- Si sobre el cuerpo del niño hay moretones, el dolor de barriga en el niño puede deberse a un golpe que el niño ha sufrido.
- Si el dolor de barriga por tensión emocional se localiza en la zona de alrededor del ombligo o en la boca del estómago. Si no es intenso e, inexplicablemente, aparece y desaparece, una o más veces al mes, durante un período de tiempo superior a los tres meses, con mucha probabilidad, se trata de un síntoma de estrés.
- Si está acompañado por otros síntomas, como náuseas, vómitos, diarrea, fiebre y palidez, muy probablemente, puede deberse a un dolor de barriga por indigestión.
- Si el dolor de barriga es ligero y sólo desaparece al cabo de una o dos horas, no hay motivo para preocuparse.
- Si, por el contrario, el dolor de barriga empeora y se vuelve constante, siempre hay que consultar con el pediatra.
Dolor de barriga por indigestión
La indigestión del niño es el principal síntoma de un fuerte dolor de barriga. Éste suele acompañarse de palidez, vómitos, náuseas y diarrea.
La causa principal de la indigestión del niño suele ser una comida exageradamente abundante. Pero no siempre es esa la razón. El niño puede haber comido demasiado o bien muy rápidamente; puede haber mezclado alimentos y bebidas diversas o, incluso, puede haber comido alimentos muy grasos (fritos, dulces, embutidos, etc.). También puede producirse por comer alimentos en mal estado.
Tratamientos
– Para aliviar al niño, se le puede masajear delicadamente la barriga en círculos, manteniéndola caliente con una manta o una bolsa de agua caliente. En el caso de que el niño sea pequeño, se aconseja tener al lado un recipiente, por si necesita vomitar.
– Asimismo, es mejor no administrar al niño alimentos sólidos. Por el contrario, es bueno que el niño se hidrate constantemente. La manzanilla, sobre todo, está indicada en caso de dificultades en la digestión e inflamación de la mucosa gastrointestinal.
Hay que acudir al pediatra en los siguientes casos:
– El niño es un lactante y sufre cólicos, que se acompañan de fiebre, estreñimiento o diarrea.
– El niño da señales de que sufre y llora ininterrumpidamente.
– Cuando camina, el niño se flexiona sobre sí mismo.
– El niño está acostado y no quiere caminar.
– El dolor de barriga afecta a la parte inferior y derecha del abdomen, donde se encuentra el apéndice.
– El niño es prematuro y el abdomen está rígido y tenso.
– El niño tiene menos de dos años y siente dolor en el bajo vientre y en el escroto.
– Hay sangre en sus heces.
– Existe la sospecha de que el niño ha comido bayas, hojas de plantas venenosas o medicamentos.
– El niño ha sufrido un fuerte golpe en la barriga.
– No tiene diarrea, pero sí calambres que aparecen y desaparecen durante más de 12 horas.
– El niño tiene dolor de barriga recurrente y no se sabe por qué.
– Pierde peso.
– El dolor, aun siendo intermitente, reaparece a lo largo de todo el día.
Ya lo sabes Súper Mamá, un dolor de barriga a veces no se debe tomar a la ligera. Por ello, te invitamos a seguir las recomendaciones para que sepas qué hacer.
Y tú, ¿qué medidas has tomado ante este padecimiento? ¡Cuéntanos tu historia!