5 Cosas De La “Nueva Normalidad” Con La Cual Toda Mamá Se Identificará

¡Imaginamos que han pasado muchas cosas en casa en esta pandemia, Súper Mamá! Queremos compartirte 5 cosas de la “nueva normalidad” con la cual toda mamá se identificará.

Súper Mamá, la pandemia por el COVID-19 ha cambiado rotundamente toda nuestra rutina. La forma en la cual llevábamos nuestras vidas es otra y, aunque volvamos progresivamente a la “nueva normalidad”, se siente como una normalidad diferente. Ahora nos toca hacer hábitos claves que antes no practicábamos.

Te comentaremos 5 cosas que debes hacer a pesar de la “nueva normalidad”, con la que seguro te identificarás.

1. Lavar las manos constantemente.

En nuestra vida diaria, el lavado de las manos era usualmente antes del momento de cada comida. Ahora, se ha convertido en casi una obsesión que no se nos puede pasar por alto si queremos de ¡lejitos al COVID-19!

2. Limpiar todos los productos al llegar del supermercado.

La llegada a tu casa, al venir del súper, ha cambiado para siempre. Ahora, debes darle un baño riguroso a cada uno de los artículos que compraste antes de colocarlos en la refrigeradora, ya que es indispensable desinfectarlos muy bien utilizando un trapito con cloro o alcohol al 60% o más.

3. ¡No puedo salir sin mascarilla!

Súper Mamá, sabemos que esto es algo que te está costando. No estás acostumbrada a andar con un tapabocas. Pasa que estamos listas para salir a la calle y ¡olvidamos el tapaboca!, pero justo en la puerta recordamos la bendita mascarilla y salimos corriendo a ponérnoslas.

4. ¡Ahora tengo que evitar tocar muchas cosas!

Este virus ha hecho que te pongas un poco paranoica. Hay que cuidarse al extremo y pensar muy bien antes de tocar cualquier superficie de tu hogar o, especialmente, cualquier cosa que veas al salir a la calle, porque te puedes contagiar.

5. ¡Todo el mundo a limpiarse bien!

Súper Mamá, además de tu salud y cuidado, por supuesto estás pendiente que todo el mundo en tu casa se lave muy bien las manos, limpie los artículos que vengan de la calle, no toquen las superficies del hogar recién llegando a casa, que se quiten la ropa que se colocaron para salir para, inmediatamente, meterla en la lavadora y ¡pare de contar!