Súper Mamá, las piernas merecen tu cuidado, no solo por la parte estética, sino que además, son una de las partes de nuestro cuerpo que más trabajan y que se impactan durante la jornada diaria. Algunas cosas que podrían perjudicar la salud de nuestras piernas son nuestro peso, las largas caminatas, malas posturas y cuando estamos demasiadas horas sentadas o de pie. Las consecuencias podrían ser padecer problemas circulatorios o que se acumule grasa innecesaria.
Por estas razones principales, es fundamental que le des un tiempo diario a tus piernas y las trates con cariño.
Súper Mamá, lo mejor que puedes hacer para mantener unas piernas bellas es hidratarte constantemente. Aplícate cremas hidratantes después de cada baño diariamente para mantenerlas hermosas. Este tipo de cremas, además de evitar la resequedad en las piernas, también minimizan el efecto que causa la celulitis.
Existen cremas hidratantes que son reafirmantes corporales, como las que tienen de ingrediente el romero que ayudan a tonificarlas. Súper Mamá, una piel hidratada se siente y se ve tersa, suave y brillante, evitando la aparición de estrías y mantiene a raya la implacable flacidez.
Cuando te apliques la crema hidratante, debes hacerlo mientras aún esté la piel húmeda, luego de la ducha, haciéndolo en sentido ascendente, desde los talones hasta las caderas. Ubica cremas que contengan: vitaminas, retinol o ácido hialurónico, agentes tensores que estimulan la producción de colágeno y reafirman los tejidos. También existen cremas con un agente bronceador que le dan un tono a la piel atractivo, haciéndolas ver más delgadas.
Para que tus piernas se vean más hermosas y estilizadas es importante que las depiles. En la actualidad existen diferentes métodos que puedes utilizar:
Súper Mamá, luego de la depilación puedes hacer terapia de agua: fría-caliente, combinando agua caliente con agua a temperatura ambiente y terminando tu baño con un chorrito de agua fría en las piernas. Esto es genial para ayudar a combatir la rigidez o pesadez de las piernas.
Súper Mamá, para mantener unas piernas tonificadas, es importante dar tensión a las mismas, especialmente en la parte interna de los muslos y las rodillas que son las zonas más afectadas. El motivo de esta pérdida de tonicidad se debe a la debilidad de los músculos abductores y la mejor solución natural para esto es realizar ejercicio. Un buen entrenamiento físico te ayudará a mantener y esculpir los contornos, lo que además favorece muchísimo la buena circulación sanguínea.
Puedes hacer ejercicios de entrenamiento en casa como: subir y bajar escaleras, manejar bicicleta, practicar patinaje, caminar durante 30 minutos al día, andar de puntillas en casa, hacer movimientos de rotación con una pelota de tenis o una manzana en la planta del pie. También, puedes inscribirte en un programa personalizado.
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