El maquillaje permanente sirve para re-dibujar cejas poco pobladas, perfilar unos labios demasiado finos o mal perfilados, delinear los ojos, disimular una cicatriz o hasta para hacerte un lunar.
Texto: Iranela Sánchez
¿Quién no ha soñado alguna vez con levantarse maquillada y perfecta para afrontar el día con mejor cara? ¿Te imaginas no tener que maquillarte todos los días? Pues, esto es posible gracias al maquillaje permanente. Con esta técnica podrás olvidarte de maquillar tus cejas cada mañana, ¡e incluso podrás dibujarte un lunar donde más te guste! Ahorrarás tiempo y dinero con esta revolucionaria práctica que cambiará para siempre tu forma de maquillarte.
El maquillaje permanente es un tatuaje que imita la apariencia del lápiz labial y el delineador de labios, cejas y ojos. Se hace mediante un proceso llamado dermopigmentación, en el que un lápiz para hacer tatuajes se usa para inyectar tinta permanente en la piel.
Cada procedimiento dura entre 30 y 120 minutos y los especialistas utilizan una anestesia local para adormecer el área que se va a tatuar. Como cualquier tatuaje, en principio el color será más brillante o más oscuro y luego perderá intensidad. El área estará hinchada entre 2 y 5 días; y se formará una especie de costra antes de que cicatrice.
Esta técnica sirve para re-dibujar cejas poco pobladas, perfilar unos labios demasiado finos o mal perfilados, delinear los ojos, disimular una cicatriz o hasta para hacerte un lunar.
Duele mucho menos que un tatuaje común y, es un maquillaje que llevarás a diario, así que tiene que ser algo natural, lo que no impide que se pueda intensificar según el gusto, con un maquillaje tradicional.
Con el paso del tiempo y la exfoliación natural de la piel, los pigmentos se eliminan y el color se atenúa. Todo depende de la velocidad con la que la piel se renueva, los colores que se han utilizado y el estilo de vida de la persona (el sol, por ejemplo, altera los pigmentos). El maquillaje, por tanto, es permanente pero sólo durante 2 o 3 años.
El maquillaje permanente siempre estará perfecto: no se corre, no se va y siempre está impecable sea cual sea el momento del día y estés donde estés.
Estimula la microcirculación y activa la actividad de las células: las arruguitas se atenúan, sobre todo, alrededor del labio.
Es ideal para la mujer que viaja constantemente. Otras mujeres optan por el maquillaje permanente cuando han perdido vellos debido a la quimioterapia, accidentes, quemaduras o cirugía cosmética, en otros casos les resulta difícil aplicarse el maquillaje debido a la edad o enfermedades, tales como la artritis; y no hay que olvidar la alergia que les produce el maquillaje a algunas mujeres.
Antes de decantarte por el maquillaje permanente, piénsalo bien. Al fin y al cabo, será algo que luzcas en tu piel durante mucho tiempo.
Antes de realizar la intervención, exige un presupuesto en el que se precise el precio y la parte del rostro que se retocará. Haz que se indique que la consulta informativa es gratuita y qué pigmentos se utilizarán. Los colores y los trazos que se apliquen deben ser de tu gusto.
Ya lo sabes Súper Mamás, si deseas puedes optar por el maquillaje permanente que será tu aliado infalible para lucir siempre presentable. Solo tómate el tiempo de buscar el lugar y el profesional idóneo para realizártelo. ¡Atrévete!
Y tú, ¿alguna vez te has hecho esta clase de maquillaje? ¡Déjanos saber tus comentarios!
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