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Fiebre: ¿aliado o enemigo?

Fiebres

En un episodio de fiebre, lo más recomendable es bañar al niño y luego darle medicamentos. ¡No pierdas la calma!

Texto: Geraldine Norte

 

La mayoría de los padres le tienen tanto miedo a la fiebre. Es obvio que no nos gusta que nuestros hijos estén enfermos, pero la fiebre es un mecanismo de defensa de nuestro cuerpo, es un aliado en realidad.

 

La definición científica de fiebre no es más que un aumento en la temperatura corporal por encima de lo que se considera normal, es causada por algún evento fisiopatológico (infección, inflamación) y funciona como un suceso adaptativo ayudando al cuerpo a combatir los organismos que causan enfermedades.

 

La fiebre por sí sola no es grave. Lo importante es averiguar qué es lo que la está causando. Solo temperaturas muy altas (más de 41°C) son riesgosas para la vida, independiente de la enfermedad causal. A la mayoría de los padres, les preocupa que por la fiebre su hijo pueda convulsionar. Una convulsión febril puede ser muy aterradora y desesperante para cualquier padre o cuidador y muchas veces por no decir todas las veces nos agarra desprevenidos. Sin embargo, en su mayor parte, no causan ningún daño y no quiere decir que el niño tenga un problema de salud prolongado o serio. Casi todos estos cuadros de convulsión febril ocurren en las primeras 24 horas de una enfermedad y no necesariamente cuando la fiebre está en su punto más alto, incluso cualquier infección puede desencadenar una convulsión febril.

 

Pero ¿qué debes hacer ante un cuadro febril? Te lo resumo a continuación:

  • Medir siempre la temperatura, no basta solo con sentirlo calientito
  • Bajar la fiebre si el niño está incómodo. Si tener fiebre hace que el niño se sienta mal, se puede tratar con un antitérmico, pero si el niño se encuentra bien, no es necesario administrarle medicamentos. La fiebre por sí sola no le va a causar ningún daño.
  • Mantener bien hidratado al niño.
  • Se pueden dar baños con agua tibia o fresca durante un periodo de 20-30 minutos.
  • Dar medicamentos indicados por el médico, no se recomienda automedicar. No todos los cuadros de fiebre ameritan antibióticos.
  • No se recomienda dar aspirina.
  • Se debe mantener la habitación con temperatura agradable y el niño debe vestir con poca ropa.

 

La Academia Americana de Pediatría recomienda llamar al doctor si el bebé entre 3 y 6 meses de edad presenta una temperatura de 38,3 grados C o bien, si tiene más de 6 meses y una temperatura de 39,4 grados C o más solamente o con los siguientes síntomas: pérdida de apetito, tos, dolor de oído, irritabilidad, somnolencia, vómitos, diarrea o dificultad para respirar. Yo recomiendo que se llame al doctor, cuando, aparte de lo anotado, el niño está muy decaído o incluso cuando es el primer episodio de fiebre que le da al niño porque generalmente en este episodio los padres se ponen muy nerviosos y no saben qué se debe hacer. Es mejor preguntar.

 

A nosotros los Pediatras, no nos sirve de mucho evaluar al niño a las pocas horas de iniciada la fiebre cuando no hay más síntomas, porque al examen físico no se encuentra mayor cosa, y en un par de días aparecen otros signos o síntomas y el paciente tiene que regresar al médico. Incontables veces he evaluado a niños con fiebre de pocas horas de evolución sin encontrar nada al examen físico y los padres se han decepcionado por no encontrar la causa, pero créanme que, con tan pocas horas de fiebre, generalmente NO encontramos nada, a menos que el pequeño ya tenga algún cuadro infeccioso evidente que cambia totalmente el panorama. En cambio, si el bebé tiene fiebre y es menor de 3 meses, si hay que acudir inmediatamente al médico porque las causas de la fiebre tienen que ser investigadas con prontitud.

 

No quiero ni mencionar cuando nos dicen que el niño tiene fiebre por dentro o solamente en la cabeza, porque la verdad aún no logró entender bien el concepto, pero eso es harina de otro costal y lo mencionaré en otra ocasión, así como, cuando se supone que les da fiebre porque los ojearon.

 

Todos los padres nos asustamos con los primeros cuadros de fiebre de nuestros hijos, hasta a mí me pasó con mi primera hija, es totalmente normal, pero con las enfermedades durante los primeros años de los hijos aprendemos a manipular la fiebre y se nos va quitando el miedo poco a poco. La fiebre es un aliado la mayoría de las veces.

 

Dra.  Geraldine Norte

Pediatría-Neonatología

2 Comments

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    • Hola Estimada Marielis

      Muchas gracias por tus palabras.

      Y es cierto, la fiebre es todo un tema, pero con la información adecuada podremos actuar de la manera correcta.

      Abrazos mil.

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